Al abordar los costos de la crisis climática de frente, el gobierno federal salvaguardará los ahorros de toda la vida de los trabajadores y las familias, estimulará la creación de empleos sindicales bien remunerados y garantizará la sostenibilidad a largo plazo de la prosperidad económica de EE. UU. La hoja de ruta deja en claro que proteger la salud financiera de los hogares estadounidenses, desplegar energía limpia en Estados Unidos y construir una economía de abajo hacia arriba y del medio hacia afuera van de la mano.