El Reino Unido (UK) abandonó la Unión Europea (UE) el 31 de enero de 2020. En virtud del Acuerdo de Retirada alcanzado entre la UE y el Reino Unido, la legislación de la UE se aplica en el Reino Unido durante un período transitorio hasta el 31 de diciembre de 2020. Esto significa que la legislación de la UE dejará de aplicarse en el Reino Unido a partir del 1 de enero de 2021 y, a partir de esa fecha, las entidades financieras del Reino Unido que no posean una autorización válida de las autoridades de supervisión de la UE perderán el derecho a prestar servicios financieros en la UE.