Las políticas sobre el cambio climático están transformando el comercio mundial y podrían exacerbar la desigualdad.
Ante la urgencia del cambio climático, muchos países están adoptando políticas para combatirlo. Sin embargo, estas políticas no solo están reconfigurando el panorama de los flujos comerciales mundiales, sino que también corren el riesgo de una mayor fragmentación y desigualdad. Uno de los desafíos se refiere a las consecuencias para los países de bajos ingresos que dependen del crecimiento impulsado por las exportaciones y, especialmente, para las pequeñas y medianas empresas (pymes) que forman parte de las cadenas de suministro mundiales. Para sortear con éxito este este desafío y promover una transición justa e inclusiva hacia un mundo más verde, se necesitan políticas audaces que fomenten la coordinación e incentiven a las empresas descarbonizarse.
El impacto de las recientes políticas de mitigación climática en los compromisos de reducción de emisiones
El gran número de políticas de mitigación del cambio climático, incluidos los objetivos de cero emisiones netas, las obligaciones de diligencia debida de la cadena de suministro y los subsidios ecológicos, está remodelando significativamente los flujos comerciales mundiales. Por ejemplo, el Mecanismo de Ajuste en Frontera de Carbono (MAFC) de la Unión Europea está penalizando las exportaciones de alto contenido de carbono a la Unión Europea (UE) para fomentar una producción más limpia y cumplir con sus propias ambiciones climáticas. La Directiva de la UE sobre información corporativa en materia de sostenibilidad exigirá a unas 50 000 grandes empresas y pymes cotizadas de la UE que informen de su impacto medioambiental y social, también a través de sus cadenas de suministro. Varios países están utilizando subsidios verdes con el riesgo de distorsionar el acceso a los mercados de las empresas de otros países que producen productos verdes. Estas políticas cambian las reglas del juego en el panorama del comercio mundial.
Remodelación de los flujos comerciales mundiales: riesgos para las pymes y los países de bajos ingresos
El cambio hacia una regulación social y ambiental más vinculante remodelará las cadenas de suministro mundiales, que son fundamentales para el desarrollo y la creación de empleo. Sin embargo, los países que no descarbonizan los procesos de producción corren el riesgo de perder el comercio frente a sus homólogos más ecológicos. La investigación del Banco Mundial muestra que las políticas de mitigación del cambio climático pueden afectar de manera desproporcionada a los países de ingresos bajos y medianos, lo que lleva a una disminución de su comercio en comparación con las economías de ingresos altos. Esto plantea un reto importante para la seguridad laboral en los sectores afectados.
El nuevo índice de Exposición al MAFC del Banco muestra, por ejemplo, que Zimbabwe es el país más vulnerable, en gran parte debido a sus considerables exportaciones a la UE de ferroaleaciones intensivas en emisiones de carbono. En Mozambique, casi el 20 por ciento de las exportaciones del país caen bajo el MAFC, lo que afecta a la economía, especialmente porque el 97 por ciento de las exportaciones de aluminio se destinan a la UE.
Nota: El índice de exposición relativa al MAFC se mide multiplicando la cuota de exportación por la diferencia entre la intensidad de las emisiones del exportador y la intensidad media de las emisiones de la UE para el producto MAFC, desglosada por el precio supuesto del MAFC (100 dólares por tonelada). Este índice identifica a los países con un exceso de emisiones de carbono con respecto a la media de la UE. En la figura, el verde significa más limpio que la media de la UE, mientras que el rojo expresa un mayor consumo de carbono que la media de la UE. Para el índice de exposición relativa al MAFC, el umbral es cero. El índice negativo (verde) indica que los exportadores relativamente limpios pueden ganar competitividad en el mercado de la UE, mientras que el positivo (rojo) indica que los países pueden perder competitividad exportadora.
Impacto desproporcionado en las pymes: desafíos de cumplimiento y riesgo de exclusión de las cadenas de suministro mundiales
Las empresas multinacionales (EMN) están sometidas a una presión cada vez mayor por parte de los consumidores, los inversores y los reguladores para que mejoren los requisitos de sostenibilidad de sus productos. Si bien este es un desarrollo positivo, conlleva costos de cumplimiento. Una encuesta reciente reveló que el 78% de las empresas multinacionales excluiría a los proveedores que pongan en peligro sus planes de transición de carbono para 2025.
Las PYMES, en particular en los países en desarrollo, soportan una mayor carga de cumplimiento debido a sus limitados recursos. El incumplimiento de estos requisitos puede dar lugar a la exclusión de las cadenas de suministro y el comercio mundiales. Por ejemplo, el nuevo Reglamento de la UE sobre productos libres de deforestación puede obstaculizar el acceso de los pequeños agricultores que producen cacao, café y aceite de palma de países como Costa de Marfil, Etiopía y Honduras.
¿Qué se necesita para una transición justa e inclusiva hacia un mundo más verde?
Para garantizar una transición justa e inclusiva hacia un mundo más verde, es fundamental aplicar políticas mejor coordinadas con requisitos de cumplimiento que sean manejables para la transición ecológica de las pymes. Esto puede lograrse mediante prácticas comerciales respetuosas con el medio ambiente, reduciendo las barreras al comercio de bienes, servicios y tecnología que ayudan a la adaptación y la mitigación.
Además, la colaboración mundial es esencial para armonizar las regulaciones e introducir acuerdos de reconocimiento mutuo para evitar duplicaciones. También es vital mejorar la capacidad institucional en materia de normas, medición y verificación del carbono, junto con el cumplimiento de las iniciativas privadas. Por ejemplo, en Georgia, menos de la mitad de las empresas monitorean el consumo de energía el consumo de energía y solo entre el 3 y el 5 por ciento monitorean las emisiones.
Movilizar apoyo para abordar las necesidades técnicas y financieras de las empresas afectadas por las políticas de mitigación es fundamental para garantizar el cumplimiento, promover prácticas sostenibles y facilitar la adopción de tecnología verde. Por ejemplo, en el Sudeste Asiático, el 79% de las pymes encuestadas reconocieron la necesidad de adquirir nuevas competencias técnicas para hacer frente eficazmente al cambio climático y aprovechar las oportunidades existentes de mitigación del cambio climático.
Es necesario aumentar la cooperación mundial y la asistencia técnica y financiera para salvaguardar el acceso y la participación continuos de las pymes en las cadenas de valor mundiales. Esto es lo que el Banco Mundial está apoyando en Brasil, Turquía y Kenia.
Conclusiones
Los desafíos que plantean las políticas de mitigación climática requieren una navegación cuidadosa para lograr una transición justa e inclusiva hacia un mundo más verde. Al implementar políticas audaces que fomenten la coordinación, incentiven la descarbonización y apoyen a las pymes, podemos promover prácticas sostenibles y facilitar la adopción de tecnología verde. El aumento de la cooperación mundial, la asistencia técnica y el apoyo financiero son esenciales para garantizar el acceso y la participación continuos de las pymes en las cadenas de valor mundiales, salvaguardando el futuro crecimiento inclusivo. Juntos, podemos sortear estos desafíos y crear un mundo más sostenible y equitativo.