10 DE JULIO DE 2024

Imagine un mundo en el que las inversiones estratégicas en salud no solo salven vidas, sino que también impulsen el crecimiento económico y la resiliencia. Esta visión estuvo en el centro del 7° Foro Anual de Financiación de la Salud, en el que cientos de participantes y expertos se reunieron recientemente para explorar la financiación de la salud en la era posterior a la COVID-19.
A medida que enfrentamos el crecimiento quinquenal más lento en 30 años, con estrés financiero, inflación y mayores niveles de deuda, las políticas fiscales innovadoras son fundamentales. La desaceleración económica, amplificada por los efectos persistentes de la COVID-19, subraya la necesidad de inversiones públicas en salud y otras prioridades sociales, como la educación, para apoyar el capital humano.
Los beneficios de los impuestos a la salud
Reconociendo estos desafíos, el Programa Tributario Mundial del Banco Mundial sobre Impuestos a la Salud llevó al foro una sesión especial centrada en el papel estratégico de los impuestos a la salud. Estos impuestos especiales sobre el tabaco, el alcohol y las bebidas azucaradas son herramientas de política multifacéticas con impactos beneficiosos para la salud, el crecimiento y los impuestos. Diseñados para reducir el consumo de bienes poco saludables, los impuestos a la salud ayudan a frenar la carga de las enfermedades no transmisibles, como el cáncer, la diabetes y las enfermedades cardiovasculares y respiratorias, que aumentan el gasto en salud pública y reducen los resultados del mercado laboral. Al mismo tiempo, los impuestos especiales sobre la salud son una herramienta fiscal capaz de generar ingresos significativos.
Cuando se diseñan e implementan cuidadosamente, los impuestos especiales sobre el tabaco pueden generar aproximadamente el 0,6% del PIB en ingresos fiscales, y los impuestos sobre el alcohol alrededor del 0,3%.

Para garantizar el éxito de estos impuestos especiales sobre la salud, las características específicas del diseño son cruciales. Estas características hacen que los impuestos a la salud sean efectivos y sostenibles:
- Aumentos regulares de las tasas: Garantizar que los impuestos sigan teniendo impacto a lo largo del tiempo, desalentando continuamente el uso de productos nocivos.
- Estructuras dirigidas al consumo: Apoyar un diseño fiscal más preciso, incluidas las estructuras fiscales que tienen en cuenta el uso del producto, como el número de barras de tabaco vendidas o el volumen de azúcar o contenido de alcohol en las bebidas.
- Indexación por inflación: Evita que el valor real de estos impuestos se erosione, asegurando que sigan siendo una fuente sólida de ingresos y un fuerte elemento disuasorio contra el consumo poco saludable.
Asignación y uso de los ingresos: ¿Qué son y por qué son importantes?
En la sesión también se profundizó en el concepto de asignación de fondos, una práctica que está cobrando fuerza debido a las necesidades de financiación sectoriales. Pero, ¿qué es exactamente la asignación y por qué es importante? La asignación implica reservar ingresos para gastos específicos, asegurando que los fondos se dediquen a objetivos de políticas particulares, incluidos programas de salud como el abandono del hábito de fumar. Esta práctica puede hacer que las asignaciones sean más específicas, pero también puede reducir la flexibilidad en el presupuesto. Sin embargo, los impuestos a la salud bien diseñados mejoran la salud de la población y reducen los costos con o sin asignación de fondos.
En el debate también se introdujo el concepto de utilización de los ingresos, un término que incluye enfoques que permiten que los fondos se dirijan a gastos prioritarios dentro del presupuesto sin asignación formal. Este método se adhiere a las buenas prácticas fiscales, al tiempo que maximiza la salud y las ganancias de ingresos.
Para lograr estos objetivos, los Ministerios de Salud desempeñan un papel fundamental en el lado de los ingresos al apoyar el diálogo en torno a los impuestos a la salud a nivel nacional para garantizar su diseño adecuado. Su participación es esencial para garantizar que los beneficios de los impuestos a la salud bien estructurados se materialicen plenamente, con o sin un propósito explícito de gasto.
Perspectivas globales y locales sobre las reformas tributarias a la salud
Otras discusiones dinámicas de profesionales y expertos aportaron perspectivas diversas y perspicaces sobre temas críticos en torno a los impuestos a la salud:
- La necesidad urgente de dar prioridad a las reformas fiscales en materia de salud, en particular para el tabaco y el alcohol, debido a sus profundos impactos en la salud y los ingresos, donde los expertos destacaron la importancia de utilizar las herramientas fiscales de manera juiciosa en áreas de política emergentes, asegurando que los impuestos sobre la salud se apliquen correctamente. Hicieron hincapié en que los impuestos especiales deben centrarse en productos nocivos específicos, mientras que los impuestos de base amplia, como el IVA, no deben utilizarse indebidamente como impuestos sanitarios, ya que esto socava su eficacia.
- Apoyo a las reformas tributarias de salud a nivel nacional, en el que los expertos en salud del Banco Mundial destacaron el poder de un enfoque coordinado de «Un solo banco», aprovechando la amplia experiencia del Banco en los sectores fiscal, de salud, de pobreza y de gobernanza. El panel también abordó los desafíos políticos y económicos de la implementación de impuestos a la salud, incluso en los sistemas federales, y la importancia de aprovechar las oportunidades estratégicas para avanzar en los objetivos de los impuestos a la salud.
Más allá del foro: Promover el impacto de los impuestos a la salud
El Foro Anual de Financiamiento de la Salud mostró la importancia del papel fundamental de los impuestos a la salud en la construcción de un futuro más saludable y resiliente. En este esfuerzo, el Programa Tributario Mundial y el Proyecto de Impuestos a la Salud del Banco Mundial brindan un apoyo esencial al impulsar la investigación que sirve de base para las decisiones clave de política. Nuestro análisis de los impuestos a la salud en las economías, el comercio y los mercados laborales, incluido el uso de datos desglosados por sexo, promueve sistemas tributarios más justos.
En junio, el Banco Mundial y la Organización Mundial de la Salud organizaron el Diálogo Internacional sobre el Financiamiento Sostenible para las Enfermedades No Transmisibles y la Salud Mental con el fin de impulsar esta agenda a nivel mundial en colaboración con nuestros asociados y garantizar beneficios duraderos tanto para la salud como para la economía. Conoce más sobre el evento aquí.

Publicado originalmente: https://blogs.worldbank.org/en/health/Smart-health-taxes-A-win-for-public-health-and-the-economy?cid=ECR_E_NewsletterWeekly_EN_EXT&deliveryName=DM225514